¿Necesita un servicio de limpieza?

Cosas a tener en cuenta a la hora de contratar un servicio de limpieza.

Están ahí, aunque pocas veces nos fijemos en ellos. Son los encargados de la limpieza de nuestro lugar de trabajo, de las instalaciones de nuestra comunidad de vecinos, del centro comercial, del cine o del autobús urbano.

Las tareas de limpieza e higienización son de gran importancia en nuestro entorno cotidiano. Son numerosas las empresas especializadas del sector, que intentan responder a la creciente demanda con una profesionalización y una competitividad en los precios cada vez mayor.

A la hora de contratar un servicio de limpieza especializado, hay algunos factores a tener en cuenta que pueden facilitar nuestra elección de la empresa y del servicio específico a contratar. Enunciaremos sucintamente algunos de estos factores.

1. Dónde hay que limpiar. En primer lugar debemos acotar el ámbito en el que va a llevarse a cabo el servicio. Hoy en día, las empresas del sector tienden a combinar la especialización con la amplitud de ámbitos de acción. Así, ofrecen trabajos de limpieza de oficinas, edificios, comunidades de vecinos o domicilio particulares.

2. Qué tipo de limpieza necesitamos. En segundo lugar, debemos distinguir si lo que necesitamos es un servicio de limpieza puntual o uno que ofrezca una continuidad. Los servicios puntuales se encargan de realizar acciones específicas y muy concretas, como puede ser una limpieza de fin de obra y el acondicionamiento de una nueva vivienda para entrar a vivir en ella, una limpieza general y a fondo de temporada, o la puesta a punto de un espacio para un evento especial. Otros servicios habituales son la limpieza de zonas de difícil acceso, o que requieren el uso de maquinaria y productos especializados, el control de plagas, o el acondicionamiento de piscinas, pozos y tuberías.

En cuanto a los trabajos de continuidad, engloba aquellos servicios de limpieza y conservación integral. Conlleva no sólo la limpieza regular de la zona en cuestión, por ejemplo la oficina en la que trabajamos. sino que incluye muchas veces la reparación de pequeñas averías (como la sustitución de una bombilla fundida) y el suministro de productos higiénicos y sanitarios.

3. Cómo debe limpiarse. En lo que respecta al cómo se va a llevar a cabo la limpieza, las empresas del sector insisten en la especificidad de las técnicas y de los productos utilizados. Ofrecen por tanto una gran variedad de métodos y de productos de limpieza, con el objetivo de ofrecer el servicio más adecuado a nuestras necesidades concretas. En este punto entran en juego consideraciones importantes como el cumplimiento de las normativas de seguridad laboral (en el caso de la limpieza de zonas de difícil acceso o de la utilización de productos químicos), así como un compromiso creciente con la protección del medio ambiente, con la elección de productos de limpieza que no resulten dañinos para nuestro entorno.